Sabemos que la marihuana se utiliza con fines terapéuticos, existen estudios que sostienen que el cannabis ayuda a reducir el dolor crónico en los enfermos de sida, posee virtudes terapéuticas en el alivio del cáncer y el Alzheimer, en Holanda se venderá marihuana como medicina y Canadá la dispensará con fines médicos. En otros casos se utiliza como fármaco recreativo y promotor de introspección.
El colectivo Rosas Verdes, según se definen en su blog, es un colectivo compuesto por afiliados, simpatizantes y colaboradores del PSOE que reivindican una política diferente sobre la cuestión del cannabis, no represiva, y que contemple la regulación de su uso y consumo. Una visión socialista sobre lo que no es un problema sanitario, ni de orden público, sino político.
Pues ahora que el gobierno es socialista puede ser un buen momento para que se pueda utilizar como fármaco recreativo y promotor de introspección, sobre todo entre los propios políticos (de todos los partidos y sin excepción), a ver si estando bajo los efectos del tetrahidrocannabinol (THC) los que nos representan se ponen de acuerdo en algo. Todo es probar y ver que pasa.
¿Cómo sería el debate sobre el Estado de la Nación bajo los efectos de la Marihuana?
[…]el cuadro de efectos subjetivos probables en reuniones de pocas o muchas personas, son factores de peso a la hora de decidirse por ella. Promociona actitudes lúdicas, a la vez que formas de ahondar la comunicación, y todo ello dentro de disposiciones desinhibidoras especiales, donde no se produce ni el derrumbamiento de la autocrítica (al estilo de la borrachera etílica) ni la sobreexcitación derivada de estimulantes muy activos, con una inevitable tendencia a la rigidez. El inconveniente principal son los malos rollos -casi siempre de tipo paranoide- que pueden hacer presa en algún contertulio. Sin embargo, estos episodios quedan reducidos al mínimo entre usuarios avezados, y se desvanecen fácilmente cuando los demás prestan a esa persona el apoyo debido.[…] Antonio Escohotado.
El único problema puede ser que a los políticos les de un mal rollo, aunque tampoco generará ningún conflicto porque en malos rollos ya están muy puestos. ¿Debate político CON o SIN?
Las preguntas siguen en el aire: ¿Debate político CON o SIN? y ¿puede servir el cannabis para aplacar la crispación social y política? 🙂
Pingback: Fresqui.com
Muy interesante el enfoque dado a la pregunta: «¿Cómo sería el debate sobre el Estado de la Nación bajo los efectos de la Marihuana?» Sería uno de los cambios sociales que creo yo, ayudarían, en parte, a la legalización del Cannabis.
En sudamerica más de la mitad de los gobiernos ya son izquierdistas; pero toma más que el sólo gobierno, para cambiar las leyes y sobre todo, la manera en que las personas comunes de la sociedad (aclaro que comunes me refiero a las millones de personas que nunca tuvieron ni tendrán contacto alguno con el cannabis) miran a el Cannabis.
Y en cuanto a tu última pregunta, creo que sí, serviría, al menos en teoría.